sábado, 22 de diciembre de 2012

Nota de suicidio. Sirkka Ports

Por fin puedo hacer la reseña de este interesante relato largo o mini novela, como queráis denominarlo. La historia de esta novela llegó a mis manos a través de mi cuenta de Twitter, al descubrir que dicha novela estaba en Amazon para descargar al irrisorio precio de cero euros. Evidentemente, como devorador de relatos que soy, no pude psar la oportunidad de descargarlo y leerlo cómodamente en mi Kindle.

Victoria es una chica de 16 años desencantada de la vida que le ha tocado vivir. Su madre, separada del padre de Victoria, vive con un reputado dentista con el que se casó ya hace unos años. Pero esta vida idílica de puertas para afuera, no es tal cosa, y el único pensamiento que Vctoria tiene en la cabeza desde hace unos años, es el del suicidio. Su consecución es algo obsesivo para ella, y piensa que cuando lo logre, acabarán todos sus problemas. Lo que no sabe es que tras su muerte, el infierno solo acaba de comenzar.

Con esta premisa comienza esta interesante historia destinada más a causar el desasosiego en el lector que cualquier otra cosa. No es una novela al uso, ya que su extensión es mas bien corta, pudiendo leerse prácticamente en una tarde, con un par de horas libres. Luz tenue y un café, es el ambiente perfecto para acompañar su lectura y hacerla más placentera.

La narración está escrita en primera persona, siendo Victoria la encargada de ir relatando lo que va ocurriendo a cada momento y en riguroso directo. Lo bueno de este tipo de narraciones es que podemos sentir lo mismo que siente la protagonista, por lo que así entendemos perfectamente cada una de las acciones de ésta. Por el contrario, las motivaciones de los demás personajes quedan relegadas a las impresiones del narrador, y no siempre pueden ser acertadas. Este es el primer fallo que veo en la novela, y es que a veces, Victoria cuenta los acontecimientos, y se adelanta a explicar las motivaciones de los demás personajes, algo bastante difícil ya que ella no puede meterse en la cabeza de estos. Es decir, no puede adivinar si la sorpresa de su madre, por ejemplo, es debida al horror que le causa su muerte, si a la pena, a la tragedia, o al miedo que le genera el quedarse sola con su marido. Victoria eso no lo puede saber, pero aun así lo explica en varias ocasiones.

Otra cosa que no me ha gustado, son ciertos detalles que Victoria va dando de las cosas, que a veces son innecesarios, y que llegan realmente para que el lector entienda ciertas cosas, en vez de dejarle a él mismo que piense el por qué de las cosas. A veces es mejor dejar ciertos detalles a la imaginación del que lee, para que él mismo se haga un universo propio de lo que pasa. Pero esto es un mal menor, que para nada desluce la historia.

Si he criticado un par de cosas, ahora toca elogiar lo que se merece Nota de suicidio. La narración es cruda, obscena, vulgar, directa. No se reprime en los detalles, y prácticamente gana enteros por la misma crudeza de la que hace gala. Llamar a las cosas por su nombre, y no ocultar los detalles escabrosos de lo que sucede, es algo que provoca en el lector un desasosiego que es necesario para la consecución del objetivo de la historia, tanto sorprender como ponerte lo más cerca de la mentalidad de Victoria.

Los personajes están bastante bien trazados, cada uno con sus enroques mentales y sus dificultades para afrontar la realidad de lo que está sucediendo a su alrededor. Desde Victoria, hasta su madre, pasando por el marido de esta y acabando por la investigadora de la policía que tambien participa de los hechos acaecidos en las páginas. Incluso otro personaje que irrumpe en la historia y que no puedo desvelar, aunque con su breve aparición, tambien tiene sus líneas de diálogos muy bien introducidas en el relato con absoluta coherencia.

Y por último la historia. Es fascinante y cruda, mas real de lo que parece y que en el fondo critica una situación bastante más habitual de lo que pensamos, y que se esconde más allá de la puerta de la habitación de nuestros hijos. No hay nada más terrorífico que los secretos que se guardan estos y que se niegan a contar a sus progenitores por miedo, vergüenza o cualquier otra motivación. Además, la finalización del relato está muy logrado y produce un verdadero efecto sorprendente en nosotros.

Por tanto, sin nada mas que añadir, aprovecho para recomendar esta estupenda lectura a todos aquellos lectores que tengan ganas de leer una buena historia, corta y directa y con pinceladas de terror. Un abrazo, nos veremos muy pronto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario